5 de abril
Hoy la Unidad Piquetera protagoniza una extendida jornada nacional de lucha, realizando reclamos por la implementación de políticas sociales y en rechazo al ajuste que ordena el Fondo Monetario Internacional (FMI). Desde las 10 horas hay cortes en todo el país, y según pronunciaron, son al menos 128.
El «piquetazo nacional» es continuidad de un plan de lucha votado el pasado 3 de marzo en Plaza de Mayo y que se reafirmó con la última actualización de datos del INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos), donde quedó constancia de que al menos 18 millones de personas son pobres en Argentina.
La caída sostenida de los salarios, hacen que los ingresos no hagan competencia al aumento de las canastas básicas, que se encuentran al menos 10 puntos arriba, según el mismo INDEC. Mientras tanto, desde 2016 viene disminuyendo la participación laboral de les jóvenes menores de 30 años y es el sector que registra la mayor caída de salarios.
¿Hasta tocar Fondo?
En este contexto, desde el año pasado se vienen registrando movilizaciones piqueteras por parte de organizaciones opositoras al Gobierno Nacional, prácticamente todos los meses.
El pasado marzo, el foco de las protestas fue el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, ya que Victoria Tolosa Paz aprobó la baja de 85mil planes Potenciar Trabajo (PT), y luego apretó más las tensiones haciendo declaraciones radiales contra el sector piquetero, hablando de “extorsión” y uso político de la pobreza en un año electoral.
Si bien Tolosa Paz buscó justificar el ajuste argumentando que las bajas corresponden al vencimiento de plazos para validar la identidad a través de la billetera virtual, los PT son uno de los planes sociolaborales que más está en la mira del FMI.
Es que, luego de los últimos diálogos de Massa con el organismo financiero, donde se habló sobre los impactos de la sequía en el agro y la pérdida de $19.000 millones, el Fondo aprovechó para insistir en la necesidad de reducir el déficit fiscal y el control del gasto público. En este marco, el staff criticó la aprobación de la moratoria previsional y planteó la necesidad de convertir 400.000 planes PT en puestos de trabajo formal, lo que implicaría una reducción de esas partidas.
Una vez más, las “recomendaciones” del FMI de continuar con recortes evidencian la lejanía de estos organismos con las realidades sociales de la clase trabajadora, es este caso la argentina.
Córdoba: entre piquetes y criminalización
En Córdoba la situación está tensa. La presencia en las calles de las organizaciones se mezcla con una año electoral que favorece la campaña de la mano dura. En la ciudad, desde el Centro Vecinal de B° Centro vienen exigiendo soluciones y reclamando que se regulen los piquetes, por lo que presentaron un habeas corpus pidiendo “tolerancia cero” contra las marchas.
Entonces, a la predisposición en el Ejecutivo y en la Legislatura -tanto del oficialismo como de la oposición- que tratan dos proyectos de ley para multar a las organizaciones y hacer un “protestódromo”, se sumo el juez de Control provincial N° 10, Juan Manuel Fernández López. Desde su despacho anticiparon que “se les va a dar toda la autoridad, en el marco de la ley, para que la fuerza policial pueda actuar”, en diálogo con Cadena 3.
A partir del fallo, las autoridades anticiparon que no está permitido el corte completo de calles, por lo que genera expectativa cómo se desarrollará la jornada que inició con concentraciones en el Puente Centenario. Por otro lado, desde la Unidad Piquetera adelantaron que también habrá marchas en otras localidades del interior, por caso Deán Funes, Malvinas Argentinas, Montecristo, Colonia Caroya, Jesús María y La Calera.
Por último, cabe destacar que si bien las movilizaciones se han hecho constantes por parte de organizaciones sociales, el método no es exclusivo de un sector. Docentes y personal de salud, que está peleando por salarios dignos y encuentra en la calle una manera de darle forma al reclamo, también se verá afectado por la criminalización de la lucha. El mayor denominador común en todo esto es la falta de empatía del Estado y el amarillismo de los medios hegemónicos de comunicación.
Fuente: enfantterrible.com.ar